lunes, 13 de diciembre de 2010

Mentalidad* de Reino vs mentalidad de iglesia



Por Joseph Mattera
Traducido por Daniel Guerrero


Jesús, Juan el Bautista, y los apóstoles andaban proclamando el Reino - no a la Iglesia (lea Mateo 3:2, 4:17, 10:07, Hechos 28:30-31). Aunque la Iglesia está en el Reino, no es todo el Reino.




"Reino" se refiere al gobierno de Dios sobre el cosmos entero (el universo), no sólo a una entidad única en la tierra, como la iglesia. A pesar de ello, hoy la mayoría de la predicación tiene como objetivo hacer que la gente haga un compromiso semanal de asistir a un edificio, por dos horas, cada domingo, ¡y que de el diezmo para apoyar ese edificio!  


Esto se debe a un espíritu de religiosidad que ha cautivado a la iglesia y cegado las mentes de los líderes de la iglesia; por lo cual, ahora tenemos una mentalidad muy limitada de Iglesia en vez de una perspectiva del Reino de Dios. Los resultados negativos de esta mentalidad no pueden ser exagerados.


En esencia, una mentalidad de Reino se refiere al cristianismo como un mundo bíblico, que ve la vida centrada en la persona de Jesucristo, quien es el Señor de toda la creación. ¡Esto tiene amplias implicaciones políticas, económicas y sociológicas! Los que tienen una mentalidad de Iglesia ven a Jesús simplemente como el Rey de la iglesia, no como el Rey de todos los reyes seculares de toda la tierra.


Los siguientes son los contrastes entre estas dos mentalidades:
1. Una mentalidad de Reino libera a todos los santos como ministros (siervos) en la sociedad (o mercado laboral de la sociedad). Una mentalidad de Iglesia sólo capacita a las personas para que sirvan en el edificio de una iglesia los domingos.


2. Una mentalidad de Reino crea riquezas para transformar una comunidad y a la nación. Una mentalidad  de iglesia motiva para que den para la edificación (desarrollo) de nuestros propios programas de la iglesia.

3. Una mentalidad de Reino es un enfoque holístico que integra al Evangelio con la política, economía y sistema público. Una mentalidad de Iglesia aísla al Evangelio de la política y al sistema público.


4. Una mentalidad de reino ve a la Biblia como un plano para estructurar cada aspecto de la sociedad. Una mentalidad de Iglesia considera a la Biblia simplemente como un libro piadoso, que nos permite escapar del mundo, entrar en el cielo y ser espiritual.


5. Con una mentalidad de reino las iglesias  abrazan y aman a sus comunidades vecinas que no son parte de la Iglesia. Con una mentalidad de Iglesia las iglesias solo abrazan aquellos individuos que se convierten dentro de sus comunidades de fe.

6. Una mentalidad Reino entrena a la gente para toda la vida. Una mentalidad de Iglesia entrena solamente a la gente para la vida de la iglesia.


7. Una  mentalidad de Reino nutre a líderes que cambian al mundo y  que son "creativos culturales" que aplican la verdad a la sociedad. Una mentalidad de Iglesia nutre a líderes que hablan el lenguaje religioso que es relevante sólo para la gente de la iglesia.

8. Una mentalidad de Reino habla del gobierno de Dios sobre todo el orden creado. Una mentalidad de Iglesia habla del Reino de Dios a través de diáconos y ancianos sobre  la congregación de una iglesia.


9.  Pastores con una mentalidad de Reino liberan a su gente para que cumplan con sus llamamientos profesionales en la sociedad (o el mercado laboral). Una mentalidad de iglesia controla a las personas marginando sus llamamientos profesionales y destacando sólo sus ministerios dominicales.

10. Una mentalidad de Reino aplica su enfoque del poder del Espíritu al mundo natural. Una mentalidad de Iglesia consiste en una espiritualidad que se separa del mundo natural.


11. Las personas con una mentalidad  de Reino están trabajando hacia un renacimiento de toda la cristiandad. Las personas con una mentalidad de Iglesia simplemente luchan por una expresión particular del cristianismo (sus propias denominaciones).


12. Iglesias con una mentalidad de Reino equipan al 100% de los santos para llenarlo todo, en todos los ámbitos de la vida (Efesios 4:10-12). Aquellos con una mentalidad de Iglesia tienen como objetivo principal dotar al 2-3% de la congregación, llamados a ser pastores de la iglesia a tiempo completo, o como ministros y misioneros.

* Mentalidad: modo de pensar o comprender algo o la existencia de algo.  También, "Conjunto de creencias que conforman el modo de pensar y actuar de un individuo o de una colectividad".

También puede leer la versión original en inglés en:

jueves, 9 de diciembre de 2010

¿POR QUÉ PREDICO SOBRE EL REINO DE DIOS?

Por Joseph Mattera 
Traducido por Daniel Guerrero
















Por "reino" me refiero al gobierno de Dios sobre toda la creación. Esto incluye la comprensión de que la iglesia no es todo el reino; sino que está sólo en el reino como su principal agente en la proclamación y aplicación.

Mis ojos se abrieron en 1995 cuando pasé de un sistema de creencias dispensacional al mensaje del Reino. Como consecuencia ¡los resultados positivos en mi vida, mensaje y ministerio no pueden ser exagerados! Creyendo que
el Mandato Cultural que está en Génesis 1:28 ha causado a mí y en mi esposa el entender cómo pensar generacionalmente y prácticamente, lo que produjo en nosotros el deseo de tener dos hijos más; formar a nuestros hijos a ser agentes de cambio del mundo (por ejemplo, mi hijo Jason es ahora el editor de
 “Eventos humanos” (Human events) y ya ha escrito un bestseller del New York Times); modificar la forma en que vemos la juventud y el ministerio de niños; y movilizar a la gente de nuestra iglesia de una mentalidad de pobreza a una mentalidad de prosperidad bíblica. 

Voy a tratar de resumir todas mis razones por lo que predico del Reino, tanto para mi propio beneficio y el beneficio de los que leen mis escritos. 

1.
 El mensaje del Reino conecta a toda la Biblia y todos sus pactos con el mandato cultural original que se encuentran en Génesis 1:28 (fructificad y multiplicaos, llenad la tierra, sometedla y tengan dominio sobre el orden creado). Sin este paso como punto de partida, no se pueden interpretar correctamente todos los demás pactos bíblicos posteriores, incluido el Nuevo Pacto, ya que el Mandato Cultural es el pacto original de la creación que le muestra a toda la humanidad nuestro propósito. 

2.
 El mensaje del Reino conecta a Jesús en su doble papel como Creador y Redentor (Juan 1:3, 11, 14; 3:16). Aquellos que predican que la cruz es sólo para la redención individual, obvian la verdad que la cruz de Cristo aconteció también con el propósito de reconciliar todas las cosas del orden creado de nuevo con Dios (lea Colosenses 1:20). 

3. El mensaje del Reino de la iglesia trae de nuevo a la narrativa general (en lugar de centrarse en varios subtemas de la Escritura), que revela el propósito final de Dios por medio de la cruz y de la iglesia: reunir  todas las cosas en unidad bajo el señorío de Cristo (leer Efesios 1:9-11). 

4. El mensaje del Reino es un mensaje generacional que conecta los puntos entre la simiente de la mujer (Génesis 3:15) y la simiente de Abraham; que luego se convertiría en la iglesia (Gálatas 3:29); y que, como hijos de Dios, estamos llamados a bendecir a todas las familias de la tierra (Génesis 12:1-3), a gobernar como reyes de la tierra (Génesis 17:5-7) y a poseer las puertas de nuestros enemigos (Génesis 22:17).  Por implicación, esto significa que el mensaje del Evangelio es integral y aplicable para los hijos de nuestros hijos, para que participen en la política, la política pública, en la economía, y en todos los asuntos prácticos de la vida que están bajo la influencia y bendición del Reino (de Dios). 

5. El mensaje del Reino es el único que da a Jesús su propio lugar como Rey de reyes y Señor de señores, porque ¡cada rey debe tener un reino para calificar como un rey!  Separar el Evangelio del (mensaje del) Reino es un intento de dar una buena noticia que sólo se aplica para la vida en el más allá. Por lo tanto, acaba con el poder de las profecías mesiánicas que hablan del llamado de Jesús como soberano de las naciones (leer Génesis 49:10; Salmo 2:9-11, Salmo 110:1-3, Isaías 9:6.7, Daniel los capítulos 2, 4, 7). 

6. Predicando el reino motiva y libera todos los santos en la iglesia para servir como ministros del Señor en Su reino. (Sólo 2.3% de todos los cristianos están llamados a servir en el ministerio de la iglesia a tiempo completo.), cada reino tiene necesidad de arquitectos, abogados, jueces, educadores, sociólogos, políticos, economistas, trabajadores sociales, escritores, etc. Comprender esto es emocionante para todas las personas en la iglesia debido a que sus llamamientos son diferentes para servir a Dios en el mercado laboral de la sociedad. 

7. ¡Predicando el reino libera la creatividad inspirada por el Espíritu Santo! El primer movimiento del Espíritu Santo no fue en el Día de Pentecostés, sino ¡cuando el Espíritu se movía sobre la creación recién hecha del planeta tierra (Génesis 1:1-3)!  Por lo tanto, el Espíritu Santo es todavía excitado y se mueve sobre la creatividad en la imagen de los portadores de Dios, mientras caminamos en nuestra vocación en la sociedad!

¡Los más grandes compositores, músicos, deportistas, escritores, poetas, dramaturgos, cineastas deben salir de nuestras iglesias!  ¡Las mayores universidades (como Harvard, Yale y Princeton, que fueron fundadas porque la iglesia predicaba el reino en los siglos 17 y 18) deben ser fundadas por los cristianos!  ¡Los hospitales y las más grandes organizaciones de caridad deben ser fundados por los cristianos y las iglesias!  ¡Los futuros alcaldes, gobernadores y presidentes deben salir del Cuerpo de Cristo, porque hemos sido llamados a poseer las puertas de nuestros enemigos y el reinado y el gobierno están en nuestro ADN espiritual (lea Génesis 17:5-7)! 

8. El reino es lo que Jesús, Juan el Bautista y Pablo predicaron y es el tema principal del Nuevo Testamento (lea Mateo 3:2, 4:17; Marcos 1:15, Hechos 28:31). 

9. El mensaje del reino hace que la iglesia sea integral en su enfoque al ministerio porque, incluso por su mismo nombre, nos presiona a pensar en nosotros, los creyentes, colectivamente, como  mayordomos del orden de la creación y gestión de la tierra. 

10. El mensaje del reino, si se recibe y predica de nuevo por la mayoría de los verdaderos creyentes, produciría en nosotros definitivamente el deseo de redimir culturas, la transformación de las ciudades, y llevar la reforma bíblica a naciones enteras. Ya que no libraría a las naciones, ya sea del juicio o la extinción, por no seguir el patrón establecido en los Diez Mandamientos, para la estructuración de las naciones. 

¡Por lo tanto, la única esperanza para los Estados Unidos es la predicación y la aplicación del mensaje del reino!  Al igual que en otras palabras, Haití no necesita otra cruzada de sanidad. ¡Lo que Haití necesita es un apóstol de gobierno, que se convierta en presidente, y ponga orden del reino y acabe con la corrupción! 

11. El mensaje del reino anuncia la herencia de Jesús que se encuentra en el Salmo 2:9-11. 

¿Dónde dice en la Biblia que Jesús hubiera muerto en la cruz, si sólo hubiera una persona en la tierra y / o un pecador para redimir? ¡Lo he oído a predicadores que lo dicen todo el tiempo!  ¡Muéstrame el capítulo y versículo que fundamenta eso! 

Jesús murió para redimir a naciones enteras y a grupos de personas. Esto va junto con nuestra herencia como santos, como se encuentra en Efesios 1:10-11 y forma parte de la Gran Comisión en Mateo 28:19, cuando Jesús mandó a los creyentes a hacer discípulos a todas las naciones, ¡no sólo a personas individuales, sino a grupos de un pueblo! 

El discipulado de las naciones era muy común en la historia de la iglesia primitiva. Por ejemplo, cuando los jefes de las tribus germánicas góticas, se convertían entonces todos los de su pueblo también se convertían. ¡Naciones enteras eran bautizadas! 

12. El mensaje del reino presiona a pastores para que lleguen a ser teólogos, que posean una cosmovisión bíblica en vez de sólo una predicación acerca de cómo sentirse bien, o con mensajes terapéuticos domingo tras domingo. 

13. El mensaje del reino nos lleva nuevamente al verdadero discipulado, ya que presiona a cada creyente a estudiar las Escrituras relacionadas con su llamado a su mercado laboral particular, y ellos aprenden no solo a pensar bíblicamente pero también a hablar secularmente. 

14. El mensaje del reino tiene sentido para todos, especialmente a los que cambian al mundo, que vienen a nuestras iglesias y se sienten aburridos cuando se les dice que el más alto llamado que pueden tener en la vida es servir como un ujier o ministro durante dos horas cada domingo. 

Debido a que hemos predicado un evangelio truncado, entonces hemos perdido a los más grandes  agentes de cambio del mundo – a políticos y estadistas con llamamiento como Churchill y a empresarios como Bill Gates -, ya que entran en nuestras iglesias y sólo escuchan mensajes que tratan con la vida después de la muerte. Por lo tanto, ¡se van y entran en el mundo en el que sus dones y talentos son realmente apreciados! 

La mentalidad de la iglesia actual sólo aprecia y ordena a predicadores el domingo, en vez de nutrir y comisionar a gente llamada dentro de la cultura secular, como ministros y profetas. Es una triste situación, debido al tipo de predicación que escuchamos todos los domingos, ¡muchas iglesias en la actualidad no tienen espacio para los creyentes llamados como el de José (el economista profeta que salvó a Egipto e Israel en Génesis 37-50), el de Daniel (que como profeta-primer ministro trajo la transformación a Babilonia y Persia), o el de Nehemías (un político-servidor que reconstruyó los muros de Jerusalén)! 

15. El mensaje del reino le permite a los padres reconocer los llamamientos al mercado laboral de sus hijos y ¡discipularles en las Escrituras de acuerdo a eso! No todos nuestros niños están llamados a ser ministros a tiempo completo de la iglesia, pero ¡todos nuestros niños están llamados a servir como ministros en el Reino! 

16. Aquellos que predican el mensaje del reino ven a todo el Antiguo Testamento tan relevante hoy para aplicar ambos, tanto la ley moral (Diez Mandamientos) como el fundamento de la ley judicial, y su extrapolación de las 613 leyes civiles que aplican la ley moral a situaciones judiciales, con el fin de lograr la debida estructuración de la sociedad. Así, el mensaje del reino causa a los creyentes a tomar en serio el Viejo Pacto (Antiguo Testamento) y a estudiarlo tanto como la Nuevo Pacto. (Las leyes civiles del Viejo Pacto han sido modificadas, especialmente las leyes sobre el pecado sexual y la pena capital, debido a la revelación de la gracia en el Nuevo Pacto). 

17. El mensaje del reino nos lleva a reinterpretar muchos pasajes sobre la salvación,  desde una aplicación meramente individualista a una aplicación sistémica y corporativa. Por ejemplo, Lucas 4:18 conecta a Jesús como Rey, anunciando que en su nuevo reino Él libera a los oprimidos, le da poder a los pobres, y libera al cautivo.  Esto se refiere a la justicia sistémica (estructural), no sólo a sacar al demonio de un individuo. Compare esto con Isaías 61:1-4, para que obtenga el verdadero significado y el contexto. Las comunidades y las ciudades son redimidas y levantadas por el mensaje del Reino. 

En Conclusión: Diez Implicaciones del mensaje del Reino 

1. Entendemos que nacer de nuevo no se trata de ir al cielo, sino que nuestros ojos se abrieron, para que podamos ver por fin el Señorío de Cristo sobre toda la tierra como Rey de Reyes (lea Juan 3:3-6). 

2. Entendemos que en Juan 3:16 Dios no sólo ama a individuos pecadores, sino que envió a Su Hijo para redimir el orden creado. (La palabra "mundo" en griego es "cosmos", que son los sistemas del orden creado.) Por lo tanto, Dios quiere, que nosotros el pueblo de Su Reino, aplique la Biblia a la economía y la política pública; y no sólo a la oración y al fruto del Espíritu. 

3. Los dones del ministerio se encuentran en Efesios 4:1,1 y podemos observar que son para equipar a los santos para la obra del ministerio en el mercado laboral (o sociedad), para llenar todas las cosas (o áreas), no sólo para el ministerio de la iglesia (lea Efesios 4:10-12 para que vea el contexto). 

4. Pasamos de un enfoque platónico/dualista de la vida, en la que erróneamente creemos que Dios sólo valora las cosas espirituales; a un enfoque holístico, en el que se valora al mundo material también. (Juan 1:14: La Palabra se hizo carne, así que la carne no es mala). 

5. Hay un movimiento hacia la encarnación, que no es sólo "Marcha por Jesús", sino que "nos movemos" por Jesús y nos sumergimos en nuestras comunidades, no sólo en nuestras iglesias.  Debemos servir a nuestras ciudades con nuestros llamamientos al mercado laboral (sociedad) como ministros del Reino, no sólo para servir a Dios los domingos en los edificios de las iglesias. 

6. La iglesia existe para nutrir a los apóstoles (enviados) al gobierno, al poder judicial, a la economía y a la educación; no sólo para los ancianos (líderes) eclesiales involucrados en el gobierno de la iglesia, en los estatutos de la iglesia, los diezmos y ofrendas, y para nutrir a los maestros de la  escuela dominical. 

7. Entendemos y vemos a Jesús como el Rey de la tierra, no sólo como el Jefe del Cuerpo de Cristo. 

8. Entendemos que la iglesia no es la totalidad del Reino, pero es el agente principal del Reino como sal y luz (Mateo 5:13-16). 

9. Estamos con el trabajo y no sólo con el avivamiento; para la transformación social, porque el avivamiento trae a las personas dentro de la iglesia, pero la transformación ubica a los creyentes para el liderazgo de la sociedad. 

10. Ahora entendemos que la Biblia no es un libro sobre el cielo (¡dice muy poco acerca del cielo!), Pero un libro sobre el pueblo de Dios señoreando (como mayordomos) sobre la tierra. 

Ambos, el Antiguo como el Nuevo Testamento, sirven como modelos para las comunidades locales de fe a expandirse y estructurar sociedades, con una cosmovisión bíblica, como sal y luz. 

A pesar de que creemos en la separación de la Iglesia y el Estado, porque son dos esferas separadas de la autoridad en el orden creado, no creemos en la separación de Dios y el Estado, porque toda la vida es acerca de opciones religiosas y morales. 

No hay tal cosa como la neutralidad moral.
 O bien la sociedad estará bajo el gobierno de un orden religioso ateo o humanista, o bajo un orden religioso bíblico. 

Para obtener mucha más información sobre este tema lea el libro sobre el Mandato de Cultura titulado Resolución en las puertas (Casa Creación, 2003).



domingo, 3 de octubre de 2010

DESUBICADO PERO ALINEADO

En días pasados asistí a una conferencia de intercesión profética y el penúltimo día el Espíritu Santo de Dios trajo a mi memoria un recuerdo, que siempre he guardado de mi niñez y que nunca pensé que me hubiera marcado tanto y que en este momento de mi vida, a mis cuarenta y seis años, pudiera marcar un kairós (momento oportuno) para el resto de mi vida.

El Señor, y no puedo pensar en nadie más, pues no tenía sentido recordar ese evento en un momento de profunda adoración; Él trajo a mi memoria aquel día, cuando tenía diez años (pocos días para cumplir mis once años) y participaba en un concurso de pintura infantil. Exactamente fue el sábado 05 de octubre de 1974. El Señor trajo a mi mente ese momento y me dijo, clara y diafanamente: "Eres un desubicado". Esas palabras me penetraron profundamente en mi espíritu y llenaron de luz todo mi ser interior. Rompí a llorar... Su luz, la luz del Espíritu de Dios, alumbra toda oscuridad en nuestro ser y nos revela quiénes somos, cómo somos, lo cual trae revelación, destino y propósito a nuestra vida.


El Señor me dijo suave, pero con precisión quirúrgica, "Eres un desubicado"... "toda tu vida has sido y serás un desubicado". Y entonces continuó explicando aquel momento. Cuando el resto de los niños pintaban casitas con chimeneas, árboles y jardines; tú viste más allá, viste la realidad y el futuro; y pintaste un mundo, con gente en él, en tinieblas y quemándose en llamas.


Y entonces me volvió a decir: "Así ha sido y será tu vida". Cuando gente a tu alrededor quiere "pintar" sus vidas 'con casitas con cielos azules, jardines con flores y pajaritos', tú has tenido que "pintar" ante ellos otra realidad, la realidad de este mundo, que este mundo está bajo maldición y está pronto a ser consumido. Cuando otros pastores y líderes quieren "pintar" sus iglesias y ministerios 'con casitas con cielos azules, jardines con flores y pajaritos', tú has tenido que "pintarles" otra realidad, la realidad de cómo Yo veo sus vidas y ministerios.


Y me dijo: "Te he dado la habilidad de ver los corazones de los hombres y ver mucho más adelante de lo que otros pueden ver, por eso eres un desubicado. Mientras otros tratan de apreciar y conservar lo que han logrado, yo te he movido mucho más adelante, por eso eres un desubicado. Y has sufrido por ello". Y me dio la sentencia lapidaria... "Tienes que aceptar lo que eres. Eres un desubicado".

Esta corta, pero contundente y profunda experiencia con el Espíritu Santo de Dios me clarificó muchas cosas... y me ha permitido iniciar un proceso de re-evaluación y re-ordenamiento de mis pensamientos y mi vida.


Deseo explicarles un poco más mi experiencia aquel sábado 05 de octubre de 1974 (05-10-74), a la edad de diez (10) años, pero faltando doce (12) días para cumplir once (11) años. Y su conexión con esta reciente experiencia el pasado viernes primero de octubre de este año (01-10-10), faltando dieciséis días para cumplir cuarenta y siete (47) años. Porque para mi ese día (kairós) significó el inicio de un nuevo ciclo para mi vida, pero Dios tenía que sanar mi alma, en lo más profundo, para que pudiera estar mejor preparado, sanado y liberado para esta nueva etapa ministerial.


Lo que pasó en ese concurso marcó e influyó mi vida, y no supe cuán profundamente, hasta el viernes pasado.


Concursé y no gané. Los jueces sentenciaron que mi pintura no era la de un "niño" de esa edad. El resto de los niños hicieron pinturas de niños, pero la mía desencajaba... estaba desubicada en el tiempo y el espacio. No pasé a la final. Sin embargo, días más tarde los jueces debatieron mi caso y finalmente me permitieron pasar a la final como un "caso especial". Mi pintura se expuso en la final, en las Torres del Silencio, en Caracas, y la primera Dama de la República de aquel momento, doña Blanca de Pérez, estaría presente, para juzgar junto con el jurado todas las pinturas que habían clasificado. Ese día tampoco gané. Pero pude ver el resto de las pinturas de los niños y entendí que la mía verdaderamente desencajaba. Y empecé a ubicar en mi mente de niño, que no siempre lo que piensas y haces agrada a los demás, al mundo. Empecé a aprender que "ser profético y lo profético" es doloroso, que desencaja en este mundo "con casitas con cielos azules, jardines con flores y pajaritos". Años más tardes, he tenido que aprender con dolor y sorpresa que lo mismo pasa dentro de la iglesia, entre amigos y colegas pastores y ministros, que quieren tener un ministerio "con casitas con cielos azules, jardines con flores y pajaritos".


Debí reconocer ante el Señor, con lagrimas y profundo dolor en mi corazón, que esas experiencias me habían herido y de alguna manera me he pasado el resto de mi vida, hasta ahora, tratando de evitar el dolor de ver cómo "mis pinturas" eran rechazadas o juzgadas como raras, desubicadas y fuera de orden, tanto fuera como dentro de la iglesia del Señor. Ahora entiendo que quizás por eso me detuve como dibujante y sobre todo como pintor; y por qué me cuesta tanto publicar lo que escribo. Reconocí ante Él que he huido al dolor. Y Él me dijo que aceptara lo que yo soy, "un desubicado". Porque Él me hizo así y quiere que sea así, para Sus propósitos eternos.


Del dolor, pasé al consuelo, a la sanidad y finalmente a la libertad en el Espíritu.


Ahora no soy alguien diferente. Sencillamente soy el que siempre debí ser. Acepté lo que Dios quiso que yo fuera y quiere yo sea: Un desubicado para el mundo, pero uno alineado con el reino de Dios. El viernes 01-10-2010 (5571), Él sencillamente me sanó y me liberó, para que sea lo que Él siempre ha querido yo sea: Su voz, sus ojos, sus manos, sus pies. Él en mí diciéndole al mundo cómo Él ve al mundo y cómo Él quiere que el mundo sea para Su gloria.


Sanó mi corazón de niño, para que comience una nueva etapa como hombre, como siervo de Dios.


De aquí en adelante, me dispongo en el Nombre de Jesús, en Su gracia y en Su poder, a decir, a pintar, a escribir y publicar todo lo que Él me diga o ponga en mi mente a hacer, para la gloria de Su Nombre y la salvación de muchos.


Soy libre para ser quien soy. Soy un desubicado para el mundo, pero uno alineado para Dios. Soy un instrumento alineado a los diseños y propósitos del reino de Dios para todas las naciones, le guste o no le guste a los que me rodean, no me importa. Me importa lo que mi Dios, mi Padre diga de mí. Decido vivir en Él, por Él y para Él, por se que eso es lo que Él quiere para mí.


Y quiero aprovechar para darle las gracias a varias personas, a dos hermanos y a dos maestras, que en mi vida han influido para que sea el artista que Dios siempre ha querido que yo sea, pero que en mi dolor, yo he tratado de ocultar y callar.

A mi hermana Drucila, quien fue la que facilitó esa experiencia en 1974 y siempre ha hecho todo lo que ha estado a su alcance para que yo tuviera una niñez y una vida mejor. Ella ha sido mi hermana mayor, pero también mi segunda mamá.

A mi hermano Samuel, quien también años más tarde, me inscribió en otro concurso de pintura infantil; pues siempre creyó en mi talento y siempre tuvo palabras de ánimo y elogio, para que prosiguiera con el talento que Dios me dio. Él ha sido mi hermano mayor, el padre que me estimulaba a desarrollar los talentos que tenía. En este segundo concurso sí gané. No gané el primer lugar, pero sí uno de los primeros premios (no recuerdo si el segundo o tercero); porque no me puse tan profético... aunque dibujé y pinté con creyónes una escena de una guerra... ;-)


A mi maestra de primer y segundo grado, Viviana Díaz (todavía recuerdo su nombre y su rostro), quien igualmente siempre me elogiaba por mi talento artístico y me llamaba "su pintor" y me hizo prometerle que cuando fuera anciana la pintaría. Desde entonces, en mi corazón de niño, siempre he buscado su rostro por toda Caracas, para tratar de encontrarla y cumplir con la promesa que aquel niño de ocho años le hizo a su maestra. Lamentablemente, todavía no la he encontrado... y mi alma no ha descansado.

A mi maestra de Escuela Dominical, Sobeida Mejías, quien con maestría y excelencia siempre preparaba sus clases con pinturas y cuadros bíblicos hermosamente pintados, que impactaban los ojos de este pequeño discípulo y artista. Con ella aprendí no solo amar al Señor con la dulzura que siempre la ha caracterizado; sino también a conjugar el arte gráfico con la buena enseñanza, para impactar la mente, los ojos y el alma de los que nos escuchan.


Sirvan estas notas, para todos aquellos, que al igual que yo, necesitamos ser sanados y liberados, para ser lo que Dios siempre ha querido que seamos y encontremos en Él nuestro diseño y propósito dentro de Su reino.


¡Bienvenidos al Club de los desubicados! ¡Y bienvenidos al Club de los alineados con el Reino de Dios!


Apóstol, porque así me lo ha pedido mi Señor y lo ha confirmado mi iglesia, Daniel Guerrero, siervo de Jesucristo, para gloria de Dios Padre.

Maracay, domingo 03 de octubre del 2010

miércoles, 22 de septiembre de 2010

PRINCIPIOS PARA LA PROSPERIDAD


Principios para la prosperidad extraídos de las enseñanzas que las siete Fiestas de Jehová (Levítico 23) nos dan:


1. Comienza en el tiempo correcto. La fiesta de la Pascua se celebra en el primer mes (Abib/Nisán) del calendario hebreo; y con esta fiesta se inicia un nuevo tiempo, un nuevo ciclo de siete acciones. Con ella Dios nos dice que todo tiene un comienzo; pero Él espera que comencemos en Su tiempo y con Él en el primer lugar de nuestra vida, proyectos o negocios.


2. Comienza de la manera correcta. Juntamente con la Pascua se celebraba la fiesta de los Panes sin levadura, que nos enseña a quitar todo aquello que nos pueda contaminar. Con esta fiesta Dios desea que examinemos nuestras motivaciones, intereses, decisiones al iniciar todo proyecto, negocio, obra o acción. Él espera que quitemos de nuestro corazón todo vestigio de orgullo y egoísmo de nuestro corazón.


3. Cultiva una sana administración: pon tu confianza y tu fuerza en Dios. Con la tercera fiesta que se celebra en el primer mes, a los tres días de celebrar la Pascua, viene la fiesta de las Primicias, que no es otra cosa que presentar ante Dios nuestros primeros frutos de nuestra labor. Esta fiesta nos enseña que desde el principio tenemos que recordar que debemos poner nuestra confianza en Dios. Si comenzamos nuestros proyectos, negocios y labor con nuestra mente y confianza puestas en Dios, entonces tenemos que ofrendarle los primeros frutos (económicos, financieros, materiales, etc), como una muestra contundente y clara de nuestro corazón confiado y agradecido a Él.


4. Trabaja para cosechar y cosechar bien. Cuando estudiamos y meditamos en las fiestas, aprendemos que Dios opera en ciclos, que Él establece Su tiempo en ciclos de siete y Él espera que tengamos cosecha en cada ciclo y en el tiempo correcto. Esto es lo que aprendemos con la fiesta de Pentecostés, que se celebra después de un ciclo de 7 semanas (lit. siete sietes o también 49 más 1 día). Debemos administrar nuestras fuerzas y recursos de una manera correcta, a fin de obtener frutos, resultados, productos; pero también debemos hacerlo en el tiempo correcto. En este tiempo también se espera que presentemos ofrendas de agradecimiento y alabanza a Aquel que nos ha dado la ciencia, la sabiduría, la fuerza y la salud para lograr nuestras metas, sueños y proyectos.


5. Escucha la Voz de Dios. Evalúa tu vida y tu trabajo, y arrepiéntete y vuélvete a Él. Este principio lo obtenemos cuando celebramos la quinta fiesta del Señor, la fiesta de las Trompetas, que se celebra el primer día del mes séptimo (Etanim/Tishri) en el calendario religioso que Dios estableció para Su pueblo. El significado primario de las trompetas (shofarim) es que simbolizan la voz de Dios, y con esta fiesta Dios nos llama a evaluarnos, a juzgar nuestras acciones antes que Él lo haga. Después de seis meses laborando, de haber trabajado y cosechado; y cuando estamos disfrutando del bienestar de nuestro trabajo o del logro de nuestros negocios, podemos olvidar que comenzamos todo primero en y con Dios. Olvidamos que nuestra administración requiere ser juzgada, evaluada según los criterios divinos y no solamente según los criterios contables de pérdidas y ganancias o mero rendimiento fiscal. Tenemos que aprender a escuchar la Voz de Dios y seguir las instrucciones que Él nos ha dejado en las Sagradas Escrituras y que nos da por medio de Su Santo Espíritu.


6. Preséntate ante Dios, juzga tu vida y tu trabajo. Este sexto principio es muy importante y lo extraemos cuando meditamos y entendemos la fiesta del Perdón o de la Expiación, que se celebra después que han transcurrido diez días después de la fiesta de las trompetas, en el mes séptimo. Nuestra vida, nuestras decisiones, negocios y proyectos deben ser evaluados y juzgados por nuestro socio principal: Dios. El tiempo para que nosotros lo hiciéramos ya pasó (durante los diez días previos), ahora será Dios, el Juez de la tierra, quien juzgará. Como buenos profesionales, trabajadores y empresarios sabemos que Dios no solamente juzgará los resultados de nuestra labor o proyectos; sino que prestará atención a nuestro corazón, a nuestro carácter. Él evaluará si dejamos que la levadura (impurezas) dominara nuestras decisiones y acciones. Él quiere ver si dejamos que nuestro egoísmo y orgullo dominara nuestra vida y nuestros negocios. Entonces recibiremos nuestra recompensa. La ley de la siembra y la cosecha se cumple tanto en nuestras obras externas, como en las obras de nuestro corazón.


7. Reposa de tu labor, descansa y medita en Dios. Toma nuevas fuerzas. Y por último la séptima fiesta nos da el principio más importante y quizás el más ignorado por los trabajadores, administradores, profesionales y empresarios de nuestros días: trabajamos desde el descanso; no trabajamos y luego descansamos. Con la fiesta de los Tabernáculos Dios nos enseña que desde el principio Su diseño es que nosotros moremos con Él y Él con nosotros. Esta fiesta cierra un ciclo pero realmente inicia otro; y subraya, enfatiza y resalta el primer principio de la vida y de una sana administración: necesitamos entrar en el Tiempo de Dios; necesitamos conocer, entender e interpretar el Tiempo de Dios.

En sus actos creativos enseñados en el libro del Génesis (los comienzos), vemos que Dios bendijo y apartó (santificó) el séptimo día (el séptimo acto creativo) para Él, para que nosotros Su pueblo, Sus hijos, nos encontremos con Él en ese Tiempo y desde ese Tiempo podamos morar, crear y señorear (administrar) juntamente con Él.

Si dedicamos suficiente tiempo para morar con Dios y entrar en la esfera de Su Tiempo, entonces Él nos dará la revelación, la ciencia, la sabiduría, la inteligencia, el consejo, el poder y la fuerza para actuar creativamente junto con Él y ser prosperados en todas las áreas de nuestra vida.


Conclusión

Medita en el Tiempo de Dios.

Medita en Sus días, fiestas y ciclos

Planifica según Sus días, fiestas y ciclos

Siembra, Cosecha, Juzga y Descansa en Dios


Bendiciones

Daniel Guerrero


NOTA: Si deseas tener mayor información sobre este tema puedes visitar el blog de la Comunidad Cristiana Hay paz con Dios, donde he colocado otras entradas relacionadas con este tema. Visita: http://haypazcondios.blogspot.com/